Para expresar una idea o situación podemos usar el lenguaje de varios modos dependiendo de QUÉ queremos decir y CÓMO queremos decirlo para provocar en el oyente osea el lector determinados sentimientos o emociones.
Los tres usos más frecuentes del lenguaje son:
1. Lenguaje coloquial: Es el uso que todos hacemos corrientemente en las conversaciones con nuestros familiares y amigos. Expresamos pensamientos, sentimientos y hechos de un modo rápido, con repeticiones, sobrentendidos, etc.
1. Lenguaje coloquial: Es el uso que todos hacemos corrientemente en las conversaciones con nuestros familiares y amigos. Expresamos pensamientos, sentimientos y hechos de un modo rápido, con repeticiones, sobrentendidos, etc.
En el lenguaje coloquial es fundamental la situación y la presencia física de los interlocutores, lo que permite un cierto descuido en la expresión (elipsis), suplido por los gestos y la entonación. La función apelativa es importante y se manifiesta en constantes llamadas al interlocutor.
"Venga... te vendo un celular. Una ganga! Es una cosa fenomenal, un chisme que no se te estropeará en mucho tiempo."
2. Lenguaje científico: El lenguaje científico busca la precisión y trata de manifestar el máximo de conceptos con el mínimo de palabras. Se caracteriza por una terminología especial que evita la polisemia y la connotación. Su ideal de claridad y su función intelectual determinan que sea esencialmente denotativo y referencial.
Todo cuerpo sumergido en un fluido experimenta un empuje vertical y hacia arriba igual al peso del volumen del fluido que desaloja.
3. Lenguaje literario: Las palabras se seleccionan y ordenan cuidadosamente para lograr una mayor calidad y belleza en el uso de la lengua. El lenguaje literario se caracteriza por la connotación y por la búsqueda de la expresividad original, que es uno de los elementos de la función poética.
Caminante, son tus huellas
el camino y nada más.
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario